La apariencia, el interior y la belleza de una tienda o establecimiento afectan la cantidad de clientes que atraen y las ventas de productos; por lo tanto, estos factores ejercen un gran impacto en la tienda o establecimiento. Por lo general, los pisos se limpian o enceran con regularidad para mantener su belleza. Tradicionalmente, los efectos de dicho trabajo de limpieza se verifican en una inspección visual realizada por los inspectores, pero debido a las diferencias de criterio entre los inspectores individuales, los criterios para los efectos son naturalmente vagos. En dicha gestión del brillo durante el mantenimiento de pisos, medidor de brillo de HORIBA es una herramienta útil para convertir dicha vaguedad en valores numéricos.
Cuando la gestión del brillo de los suelos se basa en la inspección visual, los criterios de valoración son vagos debido a las diferencias en las percepciones individuales, así como al impacto del clima, la iluminación, etc.
Al introducir medidor de brillo de HORIBA, se puede implementar una gestión clara basada en cifras en lugar de una gestión vaga basada en el juicio humano.
La cera vieja, degradada y alterada debe eliminarse. En este caso, se aplica una solución decapante uniformemente sobre el piso para levantar la cera del piso, luego se retira la cera del piso con la pulidora y luego se recoge el agua sucia con una aspiradora. Finalmente, se limpia el piso con agua y se seca.
Se miden algunos puntos del suelo seco y si hay algún punto en el que no se ha eliminado lo suficiente la cera (el brillo es superior al de otros puntos), se vuelve a realizar la eliminación de cera.
Se utiliza una mopa de cera para aplicar la cera de resina de manera uniforme sin dejar puntos donde no se haya aplicado cera. El piso se seca completamente con un ventilador, etc.
El brillo después de aplicar dos capas de cera es de 43,9, un valor significativamente superior al obtenido después de retirar la cera.
Se aplica una solución limpiadora uniformemente sobre el piso, se limpia el piso con una pulidora y se recoge el agua sucia con una aspiradora. Se limpia el piso con agua según sea necesario y se seca, luego se aplica cera al piso y se seca nuevamente.
El brillo del suelo aumentará aún más si se recubre periódicamente con cera de mantenimiento.
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